Libro de la semana: “Las grandes mujeres”, de Alfonsina Storni

(Foto: Tom Quiroz)
(Foto: Tom Quiroz)

Este 25 de octubre se cumplen 80 años del fallecimiento de Alfonsina Storni, la poeta del mar. Queremos recordarla recomendando la lectura de una antología especial dedicada a esta autora argentina: Las grandes mujeres (Nórdica libros, 2014).

Por Antonio Chumbile, Biblioteca Mario Vargas Llosa

¿Quién no ha escuchado alguna vez aquella hermosa canción titulada “Alfonsina y el mar”? Compuesta por el Ariel Ramírez y Félix Luna, popularizada en la voz de Mercedes Sosa, “Alfonsina y el mar” se inspiró enteramente en el suicidio de la poeta argentina Alfonsina Storni (1892 – 1938), ocurrido en Mar de la Plata en una escena rodeada de naturaleza y misterio. Algunos dicen que se internó en el mar caminando lentamente, como si la esperase un cálido refugio entre las aguas. Otros dicen que saltó al mar desde una escollera. Más allá del mito, todos coincidimos en que sus poemas marcaron un hito decisivo en la forjación de la poesía escrita por mujeres en Hispanoamérica.

El libro Las grandes mujeres (Nórdica libros, 2014) reúne varios de los mejores poemas que Alfonsina Storni publicó desde La inquietud del rosal (1916) hasta su último libro, Mascarilla y trébol (1938). La selección de textos corresponde con los temas que más le interesaron abordar: el mar, la mujer y la muerte. Estos tres motivos en su escritura, expresados unas veces con ternura y otras con cierta rudeza, también se encuentran muy ligadas a su biografía. Desde muy joven, Alfonsina tuvo que trabajar para subsistir y enfrentarse constantemente a las limitaciones que su época le trataba de imponer por el hecho de ser mujer. Este contexto y sus experiencias personales la motivaron a escribir varios poemas que cuestionen estas desigualdades así como también exploren, con cada vez mayor libertad, su condición de mujer. Es muy conocido, por ejemplo, el poema “Tú me quieres blanca” donde se discute esa costumbre del hombre por exigir castidad en la mujer para el matrimonio: “Tú que en los jardines / negros del Engaño / vestido de rojo / corriste al Estrago (…) me pretendes blanca / (Dios te lo perdone) / me pretendes casta.” (p. 29). De hecho, en el poema que le otorga el título al libro, se destaca el rol de las mujeres en la historia: “En las grandes mujeres reposó el universo./ Las consumió el amor, como el fuego al estaño / a unas; reinas, otras, sangraron su rebaño.” (p. 82).

Alfonsina Storni también gustó mucho de los elementos de la naturaleza. En su poesía son frecuentes las referencias a ríos, flores, aves, especies marinas y cuerpos celestes. Ella misma reconoce su cuerpo y su ser como parte del mundo natural: “Soy esa flor perdida entre juncos y achiras / que piadoso alimentas, pero acaso ni miras” (p. 58). Y aún así busca extenderse más allá de sus límites corporales: “Oh, mis dedos quisieran/ cortar estrellas” (p. 37). Sin embargo, entre estos elementos, Alfonsina siempre guardó un lugar privilegiado para el mar. Con la lectura de esta antología el lector podrá notar cómo la figura del mar impone su presencia cada vez más en el mundo de la poeta: “Oh mar, dame tu cólera tremenda, / yo me pasé la vida perdonando” (p. 65). Así como la voz de Alfonsina, el mar también se va acercando cada vez más a la muerte: “¡Oh, qué hondo grito el que daréis, qué enorme / grito de muerto, cuando el mar os coja/ entre sus brazos, y os arroje al seno/ del grande abismo que se mueve siempre!”. De hecho, en el poema “Epitafio para mi tumba” (p. 88) el mar aparece como un compañero que le ayuda a enfrentar la soledad del más allá. Todo este viaje se puede percibir en el libro cuando leemos los poemas cronológicamente.

En este viaje poético de Alfonsina Storni por la naturaleza, el amor y la fortaleza de la mujer, la muerte se asoma frecuentemente. Desde presentimientos hasta epitafios, el lector encontrará varios momentos en que la poeta encara a la muerte con la incertidumbre que sentimos todos pero también con la lucidez y el carácter que solo tiene Alfonsina. Clara Sánchez lo expresa estupendamente en el prólogo del libro, cuando señala que el suicidio de la poeta es la manifestación de una mujer voluntariosa “dispuesta a intervenir en su destino y a no dejar todo en manos del azar.” (p. 12). Mas sí dejarlo todo manos del mar, aquel compañero eterno.

Para entender el proceso histórico de la poesía escrita por mujeres en Hispanoamericana la lectura de Alfonsina Storni es imprescindible. Ella supo extender la libertad que iban ganando las mujeres de su época hacia la literatura y, al mismo tiempo, logró mantener un estilo y una sensibilidad muy personales. Los dejamos con un fragmento del poema “Voy a dormir” (p.106), el cual escribió horas antes de su suicidio para despedirse de todos nosotros:

 

Voy a dormir, nodriza mía, acuéstame.
Ponme una lámpara a la cabecera;
una constelación, la que te guste:
todas son buenas; bájala un poquito.

Déjame sola: oyes romper los brotes…
te acuna un pie celeste desde arriba
y un pájaro te traza unos compases

para que olvides… Gracias. Ah, un encargo:
si él llama nuevamente por teléfono
le dices que no insista, que he salido…

 

El libro Las grandes mujeres, de Alfonsina Storni, forma parte de nuestra Colección de Literatura Hispanoamericana y se encuentra disponible en la Biblioteca Mario Vargas Llosa de la Casa de la Literatura Peruana. Pueden consultar el texto gratuitamente de martes a domingo de 10:00 am. a 7:00 pm.