“Vamos a cazar un oso” es nuestra publicación de la semana

(Foto: Tom Quiroz)
(Foto: Tom Quiroz)

El mes de enero inician las vacaciones escolares y una excelente manera de aprovecharlas es emprendiendo aventuras, ya sea en la playa, en el campo o en un libro. La Sala de Literatura Infantil Cota Carvallo destaca como publicación de la semana un libro álbum que nos lleva de excursión: Vamos a cazar un oso, del poeta Michael Rosen y la ilustradora Helen Oxenbury.

Por Rebeca Urbina, Sala de Literatura Infantil Cota Carvallo

La caza no es precisamente una actividad apta para niños pero el libro que reseñamos esta semana nos invita a cazar un oso desde su título. Sin embargo, también en la portada vemos que los protagonistas no cuentan con equipamiento adecuado para hacerlo, sino solo con una delgada rama que difícilmente sería útil para enfrentarse con animales salvajes. En la ilustración de la tapa podemos ver a tres niños caminando con el que podría ser su padre o su hermano mayor; y, si abrimos el libro totalmente, veremos en la contratapa que vienen caminando un poco rezagados otra niña y un perro, el cual tampoco parece nada violento. Así, antes de empezar a leer el cuento, podemos saber que ésta no será una caza convencional y que van a la búsqueda de algo distinto a un oso.

Vamos a cazar un oso recrea una canción de la tradición inglesa, muy usada para campamentos y para trabajar los sonidos con niños pequeños. En otra versión de esta canción, se va en busca de un león, en lugar de un oso y los estribillos repiten: “No tengo miedo. Muy valiente soy”. El texto de Michael Rosen para este libro álbum recoge la valentía de esa declaración frente a cada obstáculo que deben enfrentar los aventureros. Para ello, se vale de una estructura repetitiva y el uso de onomatopeyas, así como preguntas desafiantes que permiten a los más pequeños seguir la historia e involucrarse con ella.

En cuanto a las ilustraciones, Helen Oxenbury traduce este texto (que no define protagonistas de forma cerrada) en la historia de una familia que sale de casa en busca de un oso o, tal vez, si abrimos más la lectura, en busca de aventuras. La perspectiva de sus ilustraciones lleva al lector a poder sentirse parte del paisaje y atravesar junto a los personajes un campo, un río, un pantano, un bosque, una tormenta e, incluso, entrar en una cueva. Oxenbury acompaña los estribillos, en los que se presentan los obstáculos de la expedición, con ilustraciones a doble hoja en lápiz negro. A su vez, las ilustraciones en acuarela a todo color acompañan los textos de onomatopeyas que se dan cuando la familia atraviesa el obstáculo en mención. Este ritmo marcado, tanto con sonoros textos como con cambios en las ilustraciones, logra que esta lectura sea recordada fácilmente por grandes y chicos, casi como una canción.

Cuando los aventureros encuentran al oso luego de atreverse a entrar en la cueva estrecha y tenebrosa, cambia el ritmo nuevamente y, por medio de viñetas acompañadas de acciones rápidas y onomatopeyas, se hace un recuento de todos los lugares que fueron recorridos, pero en forma inversa, ya que ahora quieren escapar del oso e ir en busca de su cómoda y protegida casa. Finalmente, al llegar a casa y meterse a la cama bajo el cubrecama, se lanza la pregunta: “¿Quién quiere salir a cazar un oso?”, a la cual ninguno de los escondidos protagonistas parece querer contestar, a excepción del más pequeño, quien juega feliz de la vida con un oso de peluche. Parece que el menor de todos, al igual que algunos lectores, se queda con la impresión de que el solitario oso salió de su cueva a perseguirlos porque creyó que al fin había encontrado amigos con quienes podría jugar un poco. Podemos compartir esta mirada al fijarnos en la postura decaída del oso cuando camina de regreso a su cueva, ya bien entrada la noche. Así, Vamos a cazar un oso nos lleva también a cuestionar estereotipos y ponernos a pensar que no siempre todo es lo que parece.

Invitamos a grandes y chicos a la lectura del libro del mes, Vamos a cazar un oso, este sábado 27 de enero a las 5:00 p.m., y a leer muchos libros más en la Sala de Literatura Infantil Cota Carvallo. Nuestro horario de atención es de martes a viernes de 10:00 a.m. a 5:00 p.m. y los sábados y domingos de 10:00 a.m. a 6:00 p.m. Todos nuestros servicios son gratuitos.